domingo, 4 de noviembre de 2007

Cualquier tiempo pasado fue mejor

Anoche, viendo la tele, o, más bien, haciendo zapping, por la imposibilidad de posarme en una cadena con una programación decentemente interesante, decidí dejar de pulsar botones, quizá por agotamiento en Telecinco. Ponían un programa llamado "La noria", que, en esos momentos, me pareció bastante interesante. Estaba rememorando tiempos pasados, concretamente, el borroso año 65 (que, a mí, me queda bastante lejos). Tiempos de apertura franquista (no entremos en política, que ya sabemos lo que pasa), la televisión asentada en bastantes hogares, los Beatles venían a España... y a mí se me caía la baba (dudo que de sueño o del pincho de jeta, que, semiobligado, había tomado antes con los amigos). Creo que se me caía la baba por recordar aquellos tiempos que no he vivido y desgraciadamente no viviré. Veía a los Beatles, a los Rolling, y pensaba: "Esto es música", no la bazofia enlatada que nos venden ahora. Veía el "Un, dos tres" y murmuraba: "¿Y resulta que a "Saber y Ganar" lo ponen de programa 10?". También estaban presentes "las Tacañoñas" (creo que se llamaban así) que me hicieron mucha gracia. ¿Y quién me hace gracia hoy en día? Ni el mejor monologuista... Reconozco que soy de risa difícil, pero lo que es el mundo hoy en día, tan cómodo, no es lo que era. Ante lo que se dice, no se vivía peor antaño, más bien, se vive peor ahora: La felicidad (olvidando temas políticos), la esperanza para poder mejorar, el renove que supuso la sociedad esos años, el bienestar que producía vivir... Ahora suicidio, asesinato, estrés, prisas... por todos lados.
¿Seguro que lo mejor era evolucionar? La verdad que espero que la vida de hoy en día cambie e intente asemejarse a lo que fueron esas cuatro décadas prodigiosas de los 60 a los 90. Porque echar el ancla al presente, no puede ser bueno. Y así como vuelven las modas de vestimenta, también pueden volver las de estilos de vida.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El mundo se ha acelerado vertiginosamente y parece imparable. Dentro de treinta años quién sabe si lo que ahora vivimos lo recordaremos como el paraíso comparado con lo que vendrá. Como siempre, estos tiempos traerán otros.

The_Joker dijo...

Interesante reflexión compañero.
Aún recuerdo, (allá a principios de los 90)cuando mi madre me daba los bocadillos de mortadela y ¡ala! ¡al parque a jugar! y cuando volvía, ¡ala! a vaciar el bote de la "mercromina" de todas las heridas que traía. Ahora, los niños se cierran en su habitación y ¡ala! ¡a dejarse los ojos con la Play!.
Recuerdo la época dorada del Punk español, el rebobinar cinatas "a lápiz y vueltas", los vinilos... otros tiempos.